Hoy comienza el final de un largo camino cuyo inicio fue hace mucho tiempo atrás, pero por fin parece que la “batalla” llega a su fin, muchos fueron los que le ayudaron por el camino y nunca lo olvidara, siempre recordara lo que hicieron por él y por ello les admira y siempre podrán contar con un amigo que dará la vida por ellos, pues sin ellos el no habría tenido la suya. Todo lo que es suyo es vuestro también.
La cuenta atrás lo confirma, la oscuridad que cernía a nuestro personaje, parece que se diluye poco a poco, dejando entre ver los rayos de una luz que augura la victoria de una vida, corre hacia ella atravesando el frondoso bosque que le rodea, solo ve la luz poco a poco y los troncos de los grandes árboles que esquiva tratando de encontrar el camino mas corto. El cansancio se hace presente, pero aun así no para, en su mente un único pensamiento: “Sigue adelante, no pares, ya casi es tuyo”
Cuando corre lo único que ve es la luz, los troncos de los árboles y la ausencia de color no existe, es como si una fuerza tirara de él con tanta fuerza que ya casi no es necesario que continué su martirio.
Paz, tranquilidad, satisfacción... son sentimientos que le invaden, aunque una sensación no esperada hace que su cuerpo se estremezca con un escalofrió, no es mas que la visión de un mundo nuevo, una hoja de papel en blanco a la espera de ser escrita, un destino y un solo posible final; EL ÉXITO.
Dios es increíble cuando mira atrás y ve lo que podía haber sido su futuro, un futuro triste, un futuro sin futuro, tal vez eso sea lo que le impulse alzando su cabeza y con la mirada fija hacia delante.